Se me da mejor poner exámenes que despedirme, así que seré breve. Hoy me despido de la primera promoción a la que he tenido durante tres años seguidos, desde su primera incursión en latín hasta su texto de Ambiórix en la PAEG. Entre esos dos momentos, hemos aprendido ,griego, hemos superado pequeños retos cotidianos, hemos convivido, hemos hecho presentaciones, tablillas de cera, mosaicos de dudosa calidad artística y ejercicios de todo tipo, hemos sufrido con Helena y con Alejandro Magno, hemos tomado partido por Dido, hemos investigado cuestiones escabrosas acerca de Calígula o el linaje de César, hemos llevado la toga con bastante soltura y hemos conseguido juntos gestionar situaciones difíciles. Se va una promoción que, junto a la del curso pasado, me ha hecho querer más mi profesión, incluso en unos tiempos convulsos para los profes. Una promoción de humanidades, con todo lo que eso debe significar.
Espero que recuerden estos años en su infatigable camino hacia Ítaca que, esperemos, esté verdaderamente "lleno de aventuras, lleno de experiencias".
8 comentarios:
Yo no he sido alumno tuyo pero si te he conocido en algunas de las actividades que llevas a cabo en el centro. Me quedo con ganas de haberte tenido en clase porque he visto las cosas que haceis, pero sobretodo porque creo que te ocupas mucho de tus alumnos. Harían falta más profesores así.
Un saludo
:(
Como padres de una de tus alumnas sólo podemos darte las gracias de corazón y desearte lo mejor, aquí (ojalá) o donde vayas.
Aurora
Se puede saber xq mi comentario no aparece???????!? Estamos en democracia no?
Lockesupreme, gracias. Hay muchos profesores que se ocupan de sus alumnos, la mayoría.
Nirvana, tristitia finis non est!
Aurora, te agradezco mucho tus
palabras, aquí y en la graduación del viernes.
luke666, sí, se puede saber: porque insultabas a mis alumnos y a uno de mis compañeros. Si eres capaz de escribir algo sin descalificar a alguien, no tendré ningún problema en publicarlo.
En general creo que es en 2º de Bachillerato cuando echas la vista atrás y te das cuenta de la suerte que has tenido con la inmensa mayoría de los profesores que te han dado clase. Luego están los soberbios que no van a reconocerlo nunca, claro, pero eso es otra historia :-)
Sólo una cosa
GRACIAS
Ester, imagino que es entonces cuando te das cuenta, sí. Como de todo, al salir.
Ponyo1, :)
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